Hace algunas semanas, unos días antes de la Navidad recibí un pequeño paquete enviado desde Japón con los tres primeros juegos de Bomberman que Hudson Soft publicó para la consola Super famicom. Me gustan mucho los juegos de Bomberman pero para consolas de Nintendo no tenía ninguno y los encontré a un precio más que llevadero así que me hice con ellos. Hacía ya bastante tiempo que no compraba cartuchos rom de ningún tipo y ayer recordé que como solía abrilos y quitarles el polvo o alguna cosa que pudieran tener por dentro o por fuera de modo que lo he terminado haciendo.
Lo más dificil para abrir un cartucho rom es contar con el destornillador adecuado ya que los diversos fabricantes utilizan tornillos especiales con modelos de cabeza específicos (en el caso de los de Famicom ni eso ya que no se pueden abrir más que con un sargento y mucho tiento ya que no llevan ni tornillos) yo hace muchos años que me hice con un kit completo allá por los tiempos de la PS2, XBOX y GameCube. Con el "screwdriver" de turno los abro con cuidadito primero les paso una brocha seca por ambos lados y después limpio en seco los terminales del circuito que van a la consola con cierto empeño usando un palillo de eso de los oídos.
Y nada, después con mucho cuidado los vuelvo a cerrar poniendo cada tornillo donde estaba y ya está el cartucho en cuestión listo para funcionar otros taitantos años más tranquilamente. Es importante hacer el trabajito sobre un tapete o paño seco para que no se dañen las soldaduras ni los chips o roms al apoyar las placas en la mesa. Pan comido.
Yo para los cartuchos japoneses de Super Nintendo o Super Famicom tengo un adaptador tipo HoneyBee para mi SNES europea pero como también tengo por aquí una SNES americana los uso con ella que son compatibles. Tan solo hay que limar unos salientes de plastico junto a la ranura de cartucho y se los come así tal cual. Sesión triple de Bomberman y feliz fin de semana. Enjoy!!!
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